Filete de ternera con salsa de tomate y mostaza

¿Cansado de ese filete de ternera a la plancha sin más? ¿Cansado de esa pechuga de pollo blanquita e insulsa? ¿Cómo mejorar esa chuleta de cerdo sin demasiado sabor? Esta receta es una pequeña adaptación con una salsa muy fácil de hacer y que hará que un plato aburrido se convierta en una receta diferente. En este caso vamos a hacerlo con unos filetes de ternera, pero se puede hacer con cualquier carne.

Para comenzar, como siempre los ingredientes:

              - Filetes de ternera (o de cualquier otra carne). En mi caso prefiero un filete más pequeño pero más gordos. Eso depende del gusto de cada uno.

              - Cebolla (con una cebolla mediana nos llega).

              - Ajo (dos o tres dientes de ajo son suficientes).

              - Tomate triturado (de esas latas de marca blanca que encontráis en cualquier super).

              - Mostaza ( para esta receta le va bien una mostaza de dijon suave, por ejemplo esa marrón que hay en casi todos los supermercado con la etiqueta roja es perfecta).

              - Patatas

              - Aceite, sal, pimienta y orégano

Y ahora la preparación:

              1º- Picamos la cebolla y el ajo (cuanto más pequeño mejor).

              2º- En una sartén ponemos aceite a fuego medio, y añadimos la cebolla y el ajo. Lo dejamos sofreír poco a poco hasta que la cebolla adquiere un color amarillo-transparente (si se quema un poco no pasa nada... no será perfecto pero también estará rico :P).

              3º- Cuando la cebolla y el ajo están en su punto añadimos la salsa de tomate, y dejamos que se vaya haciendo a fuego medio, mientras removemos cada poco tiempo.

              4º- A los 5 minutos (más o menos) veremos que la salsa ya no es tan líquida así que le añadimos un par de cucharaditas de mostaza (si se trata de la mostaza marrón, si es la amarilla fuerte con una cucharadita llegará), y seguimos removiendo. Le añadimos la sal y la pimienta.

             5º- Removemos durante un par de minutos y probamos la salsa, si la queremos con más sabor a mostaza repetimos el paso anterior, si nos gusta, lo dejamos otro par de minutos y lo retiramos del fuego.

             6º- Cómo acompañamiento vamos a preparar una patatas. Hay dos opciones, hacerlas fritas, o como últimamente las hago yo, que es al microondas. ¿Cómo? ¿Patatas al microondas? Pues sí... y ahora os explico como.

            7º- Pelamos las patatas, las cortamos en rodajas cuanto más finitas mejor (como patatas para el horno), y las ponemos en un plato que pueda ir al micro. Les echamos por encima un chorrito de aceite, sal y las metemos al microondas a fuego fuerte durante uno 5 o 6 minutos. Cada poco las vamos viendo y vemos como están de hechas, si necesitan más tiempo o menos. Finalmente tienen que quedar parecidas a las patatas al horno (me gusta este método porque es más sano (menos aceite), manchas menos, y tienes que estar menos atento). Al sacarlas le echamos un poquito de orégano y están riquísimas.

             8º- Ahora vamos con la carne, en una plancha (si tenemos) o en una sartén que no pegue ponemos aceite (pero poco!!! es carne a la plancha no frita). Cuando el aceite está bien caliente echamos la carne y lo  dejamos hacer a nuestro gusto (a mí personalmente me gusta vuelta y vuelta, poco hecha, que es como se debe de comer la carne, pero para gustos, colores).

            9º- Para emplatar ponemos la carne acompañada de las patatas y una ensalada básica, y echamos la salsa de mostaza (caliente) por encima de la carne.

Y ya está... una receta muy fácil y muy rápida y que hará que cambiemos de la carne sin más que solemos comer. Como siempre os digo, si probáis esta receta decidme que tal os salió y donde tuvisteis problemas. Y para cualquier duda no os cortéis en preguntar!

Nos vemos en la siguiente receta!